NREP (Nordic Real Estate Partners), un fondo de inversión inmobiliaria noruego pionero en sustentabilidad, estableció un fondo de €900 millones para invertir en segmentos poco desarrollados de emprendimiento inmobiliario basado en conceptos de sostenibilidad. El fondo comprende solamente inversiones en el bloque de países nórdicos, pero muestra el potencial del sector para recibir inversiones que busquen un retorno sobre la inversión de largo plazo, a través de una planificación estratégica.
El fondo de inversión cerró su capital total en €900 millones, luego de recibir ofertas por alrededor de €2,3 mil millones, lo que muestra un claro interés por el sector, en una región a la vanguardia del desarrollo inombiliario. Los integrantes del fondo son principalmente fondos de pensión soberanos, compañías de seguros y fondos de pensiones privados de los países nórdicos, Estados Unidos, Europa y Asia.
Durante este 2021, NREP utilizó el fondo de inversión para financiar una iniciativa de desarrollo ecológico por €130 millones. A través de una compañía llamada «2150» intenta acelerar el desarrollo de iniciativas sustentables. Mikkel Bülow-Lehnsby, presidente de NREP, declaró que «el consenso científico es claro: el mundo no puede alcanzar la reducción de CO2 necesarias sin un cambio fundamental en la forma de concebir el mercado inmobiliario». Además, agregó, es necesario un proceso de innovación industrial al que busca impulsar a través de «2150».
Canadá, pionera en desarrollo sustentable
El primer destinatario de los fondos será la firma canadiense de energía limpia CarbonCure, que apunta a reducir las emisiones de CO2 en la producción de hormigón por 500 millones de toneladas anuales. CarbonCure inyecta CO2 reciclado en la producción de concreto, removiendo emisiones de dióxido de carbono de la producción de empresas de gas, fortaleciendo al mismo tiempo el hormigón producido.
En el futuro, «2150» busca financiar 20 proyectos con un grado similar de impacto positivo en el entorno.
La firma busca incentivar un sector con gran potencial, equilibrando el foco entre el desarrollo de emprendimientos corporativos y proyectos de impacto social que estén alineados con sus objetivos. Encontrar un correcto balance entre ambos mundos, señala Bülow-Lehnsby, es la parte más difícil.